Como no habrá micros, Gobierno acordó con los demás transportes una rebaja tarifaria por un día.
Tras haberse manifestado en duda sobre si adherir o no al paro general de mañana, ayer finalmente los bancarios dispusieron tener actividad normal. Fue después de que en la paritaria nacional obtuvieran un incremento salarial del 29 por ciento más otros beneficios, según confirmó el secretario general, Mario Matic. Al mismo tiempo, y para atenuar los efectos de la protesta, el director de Tránsito y Transporte, Julio Tito Montaña, dio a conocer que por instrucciones del gobernador José Luis Gioja, quien se mostró muy molesto con la huelga (ver aparte), acordaron con las asociaciones de propietarios de taxis y remises que durante la jornada de mañana habrá una tarifa diferencial para que los usuarios puedan tener un medio para trasladarse. En la práctica significa que regirán los valores anteriores a la última suba, que comenzó a regir a fines de marzo, es decir que bajada de bandera será de 5,50 pesos, mientras que por kilómetro recorrido será de 4,80 pesos. Para evitar confusiones, el funcionario informó que los vehículos, que calculan que serán unos 1.400, estarán identificados con una oblea. Montaña dijo que a cambio de la reducción de los valores las agencias no recibirán ninguna compensación económica y recomendó que para asegurarse un vehículo la gente haga las reservas de movilidades con tiempo. En cuanto al paro, quienes adhieren lo hacen para reclamarle al Gobierno nacional por la inflación, la inseguridad, que suba el piso del impuesto a las Ganancias y para que no haya un techo en las negociaciones paritarias.
Los gremios que agrupan a los empleados de estaciones de servicio y el Sindicato Médico de San Juan, que aglutina a los profesionales de la salud, se sumaron ayer a la protesta convocada para mañana a nivel nacional por la centrales obreras que conducen Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y Pablo Micheli. A estos sectores hay que sumar al servicio de colectivos, los vuelos, el transporte de cargas y las clases en el ámbito de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ), cuyos referentes ya habían adelantado el lunes su decisión de adherir.
Desde un primer momento decidieron adherir a la huelga los gremios de choferes de colectivos y los camioneros. Por eso se verá afectado el transporte de combustibles, de residuos patológicos, lácteos, el correo privado, la recolección de residuos en Rivadavia y Chimbas, donde los servicios están tercerizados, y el transporte de caudales.
Pero desde el Banco de San Juan dieron a conocer que tomarán previsiones para que no falte efectivo en los cajeros automáticos.
En el caso de los vuelos que llegan y salen de la provincia, también se verán afectados porque la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA) decidió adherir al paro, por lo que desde las empresas aéreas recomendaron reprogramar los viajes.
Tampoco habrá clases en el ámbito de los colegios y facultades de la UNSJ porque Adicus, adherida a la CTA, se plegará a la protesta sumando 3 jornadas de paro en la semana.
Aunque ayer circularon mensajes de texto sugiriendo que mañana no se van a tener en cuenta las faltas tanto de docentes como de alumnos en las escuelas, fuentes oficiales lo desmintieron. El argumento fue que calculan que “sólo el 15 por ciento” de los 176.500 estudiantes, que son los que figuran con cobertura de seguro, es decir unos 26.400 chicos, usan colectivos para trasladarse. Tampoco habrá tratamiento especial para empleados públicos.
Otro sector que no atenderá será el Mercado Concentrador de Rawson, por las dificultades de los chacareros para transportar sus productos.
Y los últimos en adherir fueron los empleados de estaciones de servicio, según confirmó Víctor Menéndez, y el Sindicato Médico.
Según dijo el secretario adjunto de este gremio, Pablo Flores, harán abandono de tareas desde las 10 y se concentrarán para pedir una reunión con el nuevo director del Hospital Rawson, Roberto Villamayor. Los que no se sumarán son los enfermeros de ATSA y los judiciales.
Tras haberse manifestado en duda sobre si adherir o no al paro general de mañana, ayer finalmente los bancarios dispusieron tener actividad normal. Fue después de que en la paritaria nacional obtuvieran un incremento salarial del 29 por ciento más otros beneficios, según confirmó el secretario general, Mario Matic. Al mismo tiempo, y para atenuar los efectos de la protesta, el director de Tránsito y Transporte, Julio Tito Montaña, dio a conocer que por instrucciones del gobernador José Luis Gioja, quien se mostró muy molesto con la huelga (ver aparte), acordaron con las asociaciones de propietarios de taxis y remises que durante la jornada de mañana habrá una tarifa diferencial para que los usuarios puedan tener un medio para trasladarse. En la práctica significa que regirán los valores anteriores a la última suba, que comenzó a regir a fines de marzo, es decir que bajada de bandera será de 5,50 pesos, mientras que por kilómetro recorrido será de 4,80 pesos. Para evitar confusiones, el funcionario informó que los vehículos, que calculan que serán unos 1.400, estarán identificados con una oblea. Montaña dijo que a cambio de la reducción de los valores las agencias no recibirán ninguna compensación económica y recomendó que para asegurarse un vehículo la gente haga las reservas de movilidades con tiempo. En cuanto al paro, quienes adhieren lo hacen para reclamarle al Gobierno nacional por la inflación, la inseguridad, que suba el piso del impuesto a las Ganancias y para que no haya un techo en las negociaciones paritarias.
Los gremios que agrupan a los empleados de estaciones de servicio y el Sindicato Médico de San Juan, que aglutina a los profesionales de la salud, se sumaron ayer a la protesta convocada para mañana a nivel nacional por la centrales obreras que conducen Hugo Moyano, Luis Barrionuevo y Pablo Micheli. A estos sectores hay que sumar al servicio de colectivos, los vuelos, el transporte de cargas y las clases en el ámbito de la Universidad Nacional de San Juan (UNSJ), cuyos referentes ya habían adelantado el lunes su decisión de adherir.
Desde un primer momento decidieron adherir a la huelga los gremios de choferes de colectivos y los camioneros. Por eso se verá afectado el transporte de combustibles, de residuos patológicos, lácteos, el correo privado, la recolección de residuos en Rivadavia y Chimbas, donde los servicios están tercerizados, y el transporte de caudales.
Pero desde el Banco de San Juan dieron a conocer que tomarán previsiones para que no falte efectivo en los cajeros automáticos.
En el caso de los vuelos que llegan y salen de la provincia, también se verán afectados porque la Asociación del Personal Técnico Aeronáutico (APTA) decidió adherir al paro, por lo que desde las empresas aéreas recomendaron reprogramar los viajes.
Tampoco habrá clases en el ámbito de los colegios y facultades de la UNSJ porque Adicus, adherida a la CTA, se plegará a la protesta sumando 3 jornadas de paro en la semana.
Aunque ayer circularon mensajes de texto sugiriendo que mañana no se van a tener en cuenta las faltas tanto de docentes como de alumnos en las escuelas, fuentes oficiales lo desmintieron. El argumento fue que calculan que “sólo el 15 por ciento” de los 176.500 estudiantes, que son los que figuran con cobertura de seguro, es decir unos 26.400 chicos, usan colectivos para trasladarse. Tampoco habrá tratamiento especial para empleados públicos.
Otro sector que no atenderá será el Mercado Concentrador de Rawson, por las dificultades de los chacareros para transportar sus productos.
Y los últimos en adherir fueron los empleados de estaciones de servicio, según confirmó Víctor Menéndez, y el Sindicato Médico.
Según dijo el secretario adjunto de este gremio, Pablo Flores, harán abandono de tareas desde las 10 y se concentrarán para pedir una reunión con el nuevo director del Hospital Rawson, Roberto Villamayor. Los que no se sumarán son los enfermeros de ATSA y los judiciales.
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