D. E. (de ANÁLISIS DIGITAL)
La caja de sorpresas alrededor del ex gobernador y varios componentes de su familia, en cuanto a las empresas que han generado en los últimos años, no deja de generar ruido. Además de Kriptax Inc o de Ancorar S.A., también cuentan con la firma Agro Premium Sociedad Anónima. Las tres empresas tienen la misma dirección fiscal, en Capital Federal: Junin 658, piso 6, departamento A, torre B.
La empresa Agro Premium está también estrechamente ligada al negocio agrícola: “Criadero, distribución, venta y comercialización de aves, huevos y toda clase de productos y subproductos y frutos de granja”. O sea, un aspecto al que el ex gobernador Sergio Urribarri hizo una fuerte apuesta en su gestión, alentando siempre a tal inversión, aunque siempre marcando distancia con los negocios del campo, a los que, evidentemente para “afuera” resistía todo el tiempo, en línea con los preceptos de Cristina Fernández, en su fuerte pelea con la actividad agrícola. Por eso fue quizás que acordó con sus hermanos Jorge Guillermo Ramón (médico) y Armando Arturo (veterinario), al igual que a su hijo mayor Sergio Damián, el mismo que recientemente fuera incorporado a la planta permanente del Senado entrerriano en categoría 2, que también integra Kriptax.
Agro Premium SA fue creada el 10 de julio de 2012 y con la misma modalidad que la otra pyme familiar de los Urribarri: no se publicó en el Boletín Oficial de Entre Ríos, sino directamente en el Boletín Oficial de la República Argentina, con el aval de la escribana Angela Tenuta, de Capital Federal, la misma profesional que conformó Kriptax. Jorge Urribarri (61 años) vive en Arroyo Barú y estuvo al frente de la Junta de Fomento y Armando Urribarri (60) tiene domicilio en General Campos, aunque en el padrón electoral también cuenta con una dirección postal en la provincia de Mendoza.
La formación de Agro Premium fue concretada cuatro años después de Kriptax, la que fuera comprada a dos punteras barriales de la provincia de Buenos Aires, que vivían del cobro de planes sociales y que, evidentemente, fueron utilizadas como testaferros, tanto de Urribarri como de otros kirchneristas, que pusieron a su nombre por lo menos 14 empresas en el país. Es decir, se conformó en el inicio del segundo mandato de Sergio Urribarri, cuando el ex gobernador hizo una apuesta fuerte al desarrollo del negocio avícola.
Según el Ministerio de Agricultura de la Nación, en el año 2011 “la producción mundial de carne aviar estimada, alcanzó más de 81 millones de toneladas, lo que representaba un incremento de 8,9 % en relación con el año 2010. Y para el año 2012, se proyectaba un crecimiento que alcanzaría más de 82 millones de toneladas. Además, la demanda de carne aviar también se mostraba firme generando crecientes intercambios entre los países exportadores e importadores: EEUU, China y Brasil lideran la producción mundial; Brasil y EEUU, las exportaciones. En tanto, Japón, países Árabes, la UE, México y Rusia, son los principales importadores. Por su parte, Argentina mantiene un espacio en el mercado internacional ocupando el 8º lugar como productor y 5º como exportador. La producción de pollos y huevos de Argentina, en el presente período reveló un crecimiento de 11% y 4% respectivamente con respecto al año 2010. La demanda interna se mantuvo estable indicando un consumo record de 38.7 kg/habitante/año de pollo y 224 huevos/habitante/año”, decía el informe que les acercó el ministro del sector, Roberto Schunk. Además, había un dato contundente: Entre Ríos representa el 47.81 % del total de granjas avícolas del país, siguiéndole en orden de importancia la provincia de Buenos Aires.
Por esas casualidades de la vida y la política, unos meses antes de la creación de Agro Premium, en el 2011, los entonces funcionarios provinciales, el contador Alfredo Esteban Muzachiodi y el abogado Luis César Sonnaillón, conformaron la empresa B.S. Gestión SRL, con domicilio en calle Catamarca 76 de la capital entrerriana. Muzachiodi -actual presidente de la Empresa de Energía de Entre Ríos (ENERSA)- quedó como gerente. El objeto de la empresa quedó amplio: actividades agrícolas, ganaderas, avícolas, apícolas, frutícolas, citrícolas, como así también la compraventa de inmuebles urbanos y rurales en forma directa o en comisión; alquiler de propiedades y administración, entre otros. Se la conformó por 99 años y con un capital inicial de 70 mil pesos, dividido en partes iguales. Sonnaillón fue hasta mediados del año pasado representante del gobierno entrerriano en el Nuevo Banco de Entre Ríos Sociedad Anónima.
Fue a principios de 2012 que Muzachiodi y Sonaillón bosquejaron la compra de tierras en la zona de María Grande, cerca de las termas y el acceso a la ruta 10, para proyectar el gran negocio que tenían en mente: instalar galpones para la producción avícola. Cuando se cerró la operación, hasta las tierras adquiridas a la familia Furlán (cuyo propietario falleció trágicamente hace un tiempo con un episodio accidental con un equino) llegaron varias máquinas de Vialidad Provincial, a fin de dejar en condiciones el amplio terreno donde se fueron instalando un total de 8 galpones, con tecnología de última generación. “Cuesta no menos de 150 mil dólares instalar cada galpón”, reveló un entendido. O sea, una inversión millonaria.
Lo que se desconoce es si la millonaria empresa de Muzachiodi-Sonaillón tiene alguna relación laboral con la firma de los hermanos y el hijo de Urribarri, en esa apuesta al negocio avícola. Lo que queda claro, es que también tendrán que ser investigados por la justicia provincial, en el marco de la causa por enriquecimiento ilícito contra el ex mandatario y varios integrantes de su familia.AlFrente
