Los consumidores tendrán una tregua al menos a la hora de llenar los tanques de sus autos durante el próximo mes y medio. Después de los aumentos consensuados con el Gobierno por cinco meses consecutivos, las petroleras decidieron que durante junio y hasta mediados del mes que viene no realizarán nuevos ajustes en los precios de sus productos.
Ésa es la idea, según confirmaron bajo reserva en tres empresas a El Cronista, siempre y cuando no se registren movimientos bruscos en el tipo de cambio ya que los costos de las compañías se ajustan en dólares. Desde el Ministerio de Economía también indicaron que no está previsto nuevas subas en el corto plazo.
Si bien el dólar registró en mayo un avance de casi 1,5% o de 10 centavos tras la quietud que evidenció durante tres meses (ésa era una de las concesiones que había cedido el equipo del ministro de Economía, Axel Kicillof, como contrapartida de los aumentos en los surtidores), en el mercado señalan que todavía es una suba pequeña. Pero no es tanto la marginalidad del incremento lo que llevó a los directivos petroleros evaluar dejar los precios estables por un tiempo, sino los números en las estaciones. Según apuntan en el mercado, las ventas de combustibles retrocedieron en el mes de mayo y lo adjudican a la suba de precios.
Todavía no se publicaron las cifras oficiales en la Secretaría de Energía correspondientes al mes pasado, pero en las estaciones de servicios hablan de un retroceso de entre 5% y 15%. “En algunos casos hubo caídas de hasta un 40%”, explicó Tomás Abdala, presidente de la Cámara de Expendedores de Santiago del Estero (Cepase). La luz amarilla ya se había encendido en abril cuando se conocieron los datos de comercialización de marzo. Ese mes el consumo de naftas y gasoil en las estaciones de servicio de todo el país cayó 0,6%. Y si bien se trató de un porcentaje menor, la alerta apareció por ser la primera baja desde abril de 2012.
Subas escalonadas
La inmovilidad de precios de las próximas semanas también fue ratificada por los estacioneros. “Se viene un período de amesetamiento de precios de entre 40 y 60 días, según nos transmitieron en una de las principales empresas”, señaló el presidente de una de las cámaras expendedoras.
El acuerdo con el Gobierno habilitaba aumentos en nafta y gasoil hasta el mes pasado. Las petroleras subieron el valor del litro de los combustibles un 7% el 1´ de enero; un 6% en febrero; otro 6,1% en marzo; un 5,4% en abril, y en mayo sumaron otro 3,8%. La suba en el año fue su perior al 28%, pero marcó un fuerte salto de 60% en los últimos 12 meses.
Para el segundo semestre esperan que el esquema de subas escalonadas vuelva.
Si bien el dólar registró en mayo un avance de casi 1,5% o de 10 centavos tras la quietud que evidenció durante tres meses (ésa era una de las concesiones que había cedido el equipo del ministro de Economía, Axel Kicillof, como contrapartida de los aumentos en los surtidores), en el mercado señalan que todavía es una suba pequeña. Pero no es tanto la marginalidad del incremento lo que llevó a los directivos petroleros evaluar dejar los precios estables por un tiempo, sino los números en las estaciones. Según apuntan en el mercado, las ventas de combustibles retrocedieron en el mes de mayo y lo adjudican a la suba de precios.
Todavía no se publicaron las cifras oficiales en la Secretaría de Energía correspondientes al mes pasado, pero en las estaciones de servicios hablan de un retroceso de entre 5% y 15%. “En algunos casos hubo caídas de hasta un 40%”, explicó Tomás Abdala, presidente de la Cámara de Expendedores de Santiago del Estero (Cepase). La luz amarilla ya se había encendido en abril cuando se conocieron los datos de comercialización de marzo. Ese mes el consumo de naftas y gasoil en las estaciones de servicio de todo el país cayó 0,6%. Y si bien se trató de un porcentaje menor, la alerta apareció por ser la primera baja desde abril de 2012.
Subas escalonadas
La inmovilidad de precios de las próximas semanas también fue ratificada por los estacioneros. “Se viene un período de amesetamiento de precios de entre 40 y 60 días, según nos transmitieron en una de las principales empresas”, señaló el presidente de una de las cámaras expendedoras.
El acuerdo con el Gobierno habilitaba aumentos en nafta y gasoil hasta el mes pasado. Las petroleras subieron el valor del litro de los combustibles un 7% el 1´ de enero; un 6% en febrero; otro 6,1% en marzo; un 5,4% en abril, y en mayo sumaron otro 3,8%. La suba en el año fue su perior al 28%, pero marcó un fuerte salto de 60% en los últimos 12 meses.
Para el segundo semestre esperan que el esquema de subas escalonadas vuelva.
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