Walter Ariel Alanís (40) quien tenía pedido de captura ordenada por la Justicia Federal fue finalmente detenido a la madrugada del lunes 09/06 en momentos en que se encontraba en un local bailable de San Fernando del Valle de Catamarca. Alanís, acusado por la oposición de ser un supuesto puntero político del ex ministro de Gobierno, Francisco Gordillo, llevaba 1 año y 7 meses prófugo por una causa de drogas en la que se secuestraron 90 kilos de marihuana en 2012.
El procedimiento de detención incluyó un importante desorden en el lugar y el arresto de 2 abogados, uno de ellos el defensor de Alanís, quienes, según acusaciones de la policía, entorpecieron el accionar policial. Pero hubo otro acontecimiento muy grave...
Miguel Leiva, hijo de la presidente de la Corte de Justicia de Catamarca, Amelia Sesto de Leiva, fue detenido en una discoteca de San Fernando del Valle de Catamarca, cuando intentó impedir, mediante el uso de la fuerza y amenazas, que la policía local detuviera a Ariel Alaniz, prófugo con pedido de detención internacional desde hace casi 2 años, acusado de narcotráfico.
El joven Leiva, abogado como su madre, miembro de la Corte desde la Gobernación de Oscar Castillo, es el defensor de Alaniz, acusado de transportar 90 kilogramos de marihuana incautadas en la Ruta Nacional 38 en noviembre de 2012, y prófugo desde ese operativo policial y con pedido de captura internacional.
Leiva se encuentra detenido en la Brigada de Investigaciones, junto al otro abogado de Alaniz, Luciano Rojas -que estaba junto a ellos en el local bailable-, por pretender obstaculizar el procedimiento de detención del prófugo Alaniz.
“El abogado del medio habría intentado entorpecer el procedimiento agrediendo al personal policial a quienes les arrojó botellas de vidrio y les propinó golpes de puño y patadas, por lo que fue reducido y retirado del lugar en la unidad móvil de la Comisaría Quinta”, explicaron en conferencia de prensa las autoridades policiales.
Además, la Policía sin citar a Leiva, indicó que “uno de los abogados” del narcotraficante intentó impedir que se lo llevaran, amenazando al personal interviniente diciéndoles “que perderían el puesto de trabajo debido a sus fuertes influencias que poseía” e intentó agredir físicamente a la policía.
Según la información a la que pudo acceder el diario El Ancasti, de la capital provincial catamarqueña, el hecho se registró alrededor de las 5:50. La Brigada de Investigación habría contado con datos sobre los movimientos del prófugo, y apostó personal en el local bailable Cubas, ubicado en Sánchez Oviedo y General Díaz.
Los efectivos habrían descubierto a Alanís en el local pasadas las 4:30, en compañía de su abogado Luciano Rojas. Versiones indican que llegaron juntos aunque Rojas lo negó.
Luego se organizó un operativo para evitar que el sujeto huyera y alrededor de las 5:50 se decidió actuar aprovechando el momento en que Alanís ingresó al baño, donde habría sido rodeado por personal de Investigaciones.
Según se aseguró, el detenido no opuso resistencia.
El problema se originó cuando, aparentemente, el abogado Luciano Rojas intervino en el procedimiento intentando impedir que lo arrestaran.
Según el parte oficial de la policía, el abogado (aunque no lo identificaron) "habría intentado entorpecer el procedimiento agrediendo al personal policial a quienes les arrojó botellas de vidrio y les propinó golpes de puño y patadas, por lo que fue reducido y retirado del lugar en la unidad móvil de la Comisaría 5ta."
Cuando la policía se disponía a ingresar al abogado al móvil policial habría intervenido el otro abogado, Miguel Leiva, amigo de Rojas.
"Mientras (Rojas) era subido al móvil de la seccional, se presentó otra persona del sexo masculino quien dijo ser también abogado, intentando impedir que se lo llevaran y amenazando al personal interviniente que perderían el puesto de trabajo debido a sus fuertes influencias que poseía e intentó agredir físicamente a los uniformados, por lo que también fue aprehendido y trasladado a la dependencia policial", afirmó el parte oficial que no identificó al segundo abogado, aunque en la conferencia de prensa el jefe de policía confirmó que se trataba de Miguel Leiva.
El juez Ricardo Moreno ordenó que quedara incomunicado, y en 48 horas se fijará su indagatoria por el delito que está imputado.
El hecho por el cual se buscaba a Alanís sucedió el 16/11/2012 tras el secuestro de 90 kilos de marihuana en el Puesto Caminero de la ruta nacional 38. En el lugar y tras el secuestro de un auto fue detenido Claudio Tello, quien al momento de declarar comprometió a Ariel Alanís al señalar que él lo contrató para realizar el viaje, que en un principio fue pactado hasta Santiago del Estero y que terminó en Corrientes, donde cargaron la droga.
La situación de Alanís se agravó cuando Claudio Tello decidió ampliar su declaración. En la misma aseguró que Alanís le dijo que el cargamento que trasladaban eran "bebidas alcohólicas prohibidas para la inauguración del boliche del ministro Francisco Gordillo". El 26/11/2012 se ordenó la captura de Alanís, luego de las comprometedoras declaraciones de el detenido.
El procedimiento de detención incluyó un importante desorden en el lugar y el arresto de 2 abogados, uno de ellos el defensor de Alanís, quienes, según acusaciones de la policía, entorpecieron el accionar policial. Pero hubo otro acontecimiento muy grave...
Miguel Leiva, hijo de la presidente de la Corte de Justicia de Catamarca, Amelia Sesto de Leiva, fue detenido en una discoteca de San Fernando del Valle de Catamarca, cuando intentó impedir, mediante el uso de la fuerza y amenazas, que la policía local detuviera a Ariel Alaniz, prófugo con pedido de detención internacional desde hace casi 2 años, acusado de narcotráfico.
El joven Leiva, abogado como su madre, miembro de la Corte desde la Gobernación de Oscar Castillo, es el defensor de Alaniz, acusado de transportar 90 kilogramos de marihuana incautadas en la Ruta Nacional 38 en noviembre de 2012, y prófugo desde ese operativo policial y con pedido de captura internacional.
Leiva se encuentra detenido en la Brigada de Investigaciones, junto al otro abogado de Alaniz, Luciano Rojas -que estaba junto a ellos en el local bailable-, por pretender obstaculizar el procedimiento de detención del prófugo Alaniz.
“El abogado del medio habría intentado entorpecer el procedimiento agrediendo al personal policial a quienes les arrojó botellas de vidrio y les propinó golpes de puño y patadas, por lo que fue reducido y retirado del lugar en la unidad móvil de la Comisaría Quinta”, explicaron en conferencia de prensa las autoridades policiales.
Además, la Policía sin citar a Leiva, indicó que “uno de los abogados” del narcotraficante intentó impedir que se lo llevaran, amenazando al personal interviniente diciéndoles “que perderían el puesto de trabajo debido a sus fuertes influencias que poseía” e intentó agredir físicamente a la policía.
Según la información a la que pudo acceder el diario El Ancasti, de la capital provincial catamarqueña, el hecho se registró alrededor de las 5:50. La Brigada de Investigación habría contado con datos sobre los movimientos del prófugo, y apostó personal en el local bailable Cubas, ubicado en Sánchez Oviedo y General Díaz.
Los efectivos habrían descubierto a Alanís en el local pasadas las 4:30, en compañía de su abogado Luciano Rojas. Versiones indican que llegaron juntos aunque Rojas lo negó.
Luego se organizó un operativo para evitar que el sujeto huyera y alrededor de las 5:50 se decidió actuar aprovechando el momento en que Alanís ingresó al baño, donde habría sido rodeado por personal de Investigaciones.
Según se aseguró, el detenido no opuso resistencia.
El problema se originó cuando, aparentemente, el abogado Luciano Rojas intervino en el procedimiento intentando impedir que lo arrestaran.
Según el parte oficial de la policía, el abogado (aunque no lo identificaron) "habría intentado entorpecer el procedimiento agrediendo al personal policial a quienes les arrojó botellas de vidrio y les propinó golpes de puño y patadas, por lo que fue reducido y retirado del lugar en la unidad móvil de la Comisaría 5ta."
Cuando la policía se disponía a ingresar al abogado al móvil policial habría intervenido el otro abogado, Miguel Leiva, amigo de Rojas.
"Mientras (Rojas) era subido al móvil de la seccional, se presentó otra persona del sexo masculino quien dijo ser también abogado, intentando impedir que se lo llevaran y amenazando al personal interviniente que perderían el puesto de trabajo debido a sus fuertes influencias que poseía e intentó agredir físicamente a los uniformados, por lo que también fue aprehendido y trasladado a la dependencia policial", afirmó el parte oficial que no identificó al segundo abogado, aunque en la conferencia de prensa el jefe de policía confirmó que se trataba de Miguel Leiva.
El juez Ricardo Moreno ordenó que quedara incomunicado, y en 48 horas se fijará su indagatoria por el delito que está imputado.
El hecho por el cual se buscaba a Alanís sucedió el 16/11/2012 tras el secuestro de 90 kilos de marihuana en el Puesto Caminero de la ruta nacional 38. En el lugar y tras el secuestro de un auto fue detenido Claudio Tello, quien al momento de declarar comprometió a Ariel Alanís al señalar que él lo contrató para realizar el viaje, que en un principio fue pactado hasta Santiago del Estero y que terminó en Corrientes, donde cargaron la droga.
La situación de Alanís se agravó cuando Claudio Tello decidió ampliar su declaración. En la misma aseguró que Alanís le dijo que el cargamento que trasladaban eran "bebidas alcohólicas prohibidas para la inauguración del boliche del ministro Francisco Gordillo". El 26/11/2012 se ordenó la captura de Alanís, luego de las comprometedoras declaraciones de el detenido.
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