Confirman la existencia de la misteriosa área 51

Finalmente, el silencio oficial sobre la misteriosa Area 51 comienza a levantarse. Desde luego no hay revelaciones sobre cuerpos de extraterrestres sometidos a autopsias o mantenidos en criogenia, ni tampoco se menciona nada sobre naves espaciales o tecnologías procedentes del espacio exterior bajo custodia ultrasecreta en un remoto paraje del desierto de Nevada                              

Nada hay de eso y los amantes de las teorías conspirativas aún tienen mucha tela por donde cortar.
Pero al nivel de los datos históricos, las revelaciones recientes son sin duda relevantes y muestran una discreta apertura de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) en el tema de la famosa Area 51.
Documentos del Archivo de Seguridad Nacional recientemente desclasificados luego de una petición basada en la Ley de Libertad de Información proveen por primera vez menciones oficiales sobre esta zona, también conocida como Groom Lake, Homey Airport, Watertown o Paradise Ranch, sobre su ubicación y su función.
La famosa y misteriosa instalación militar fue establecida en la década de 1950 como un sitio de pruebas para el avión espía estadounidense U-2, una aeronave que fue tecnológica y estratégicamente revolucionaria para su época y otorgó a Estados Unidos destacada información de inteligencia sobre operaciones de la extinta Unión Soviética y sus aliados (la identificación de la magnitud de la fuerza de bombarderos soviéticos o la presencia de misiles de la URSS en Cuba), más algunos dolores de cabeza como el derribo en 1960 de un U-2 sobre la extinta URSS y otro en 1962 sobre la isla caribeña.
                               Se sabía de modo extraoficial que el Area 51 se situaba en el desierto de Nevada, en la orilla sur del lago Groom a unas 83 millas de Las Vegas. Pero su ubicación y su uso no habían sido revelados hasta ahora por fuentes oficiales. Es la primera vez que se conoce públicamente un documento del gobierno que hace alusión a esa instalación secreta operada por la CIA.
La fuente de las revelaciones es un reporte de la CIA escrito en 1992 –titulado “La Agencia Central de Inteligencia y el Reconocimiento Aéreo: Los Programas U-2 y Oxcart, 1954-1974″ – menciona al Area 51 en el marco de información sobre el programa del U-2. El documento relata incluso cómo el lugar fue ubicado inicialmente en la década de 1950 y elegido como un sitio de acceso restringido para realizar las pruebas del avión espía U-2. Se trataba de una antigua pista de aterrizaje usada para entrenamiento durante la Segunda Guerra Mundial pero que estuvo abandonada por casi una década. Por su ubicación remota, la CIA determinó hacerse con ese sitio y nació así el Area 51 como campo de pruebas del U-2 (fabricado por Lockheed en California) y de entrenamiento de sus pilotos.
Así que los únicos objetos voladores no identificados que, oficialmente, han volado sobre el Area 51 son justamente los aviones espía U-2, naves que para su época y en el contexto de alta tensión de la Guerra Fría no solo eran tecnológicamente innovadores sino capaces en cierto grado de alterar el balance de las superpotencias en disputa.
El avión U-2 podía volar a 60,000 pies de altura y junto al A-12 (Oxcart) habrían sido los responsables de la gran mayoría de los avistamientos que en su época fueron considerados objetos voladores no identificados. Esto, según esta línea, habría conducido a que algunos atribuyeran esos vuelos a naves extraterrestres, y no a aviones secretos, creando así una leyenda.
El reporte aparentemente no indica para qué se ha usado el Area 51 después de 1974 y, en todo caso, no apagará las ansias de información y las interpretaciones de los interesados en la historia en sí y de los que están fascinados por los relatos de extraterrestres.